Esta mañana, padres de familia, administrativos, maestros y alumnos del Cobaev 46, de la ciudad de Córdoba, emitieron un pronunciamiento frente a las instalaciones de la institución educativa, en relación con los recientes acontecimientos en los que se señala a su escuela como ’búnker’ electoral de una candidata. En el acto, se dio lectura a un comunicado oficial en el cual tanto maestros como alumnos y padres se deslindaban de las acusaciones que la Secretaría de Educación de Veracruz hizo públicas en días pasados.

Negaron, en primer lugar, que ellos fueran los denunciantes de estos actos ilegales, como se cita en la nota informativa difundida en los medios y en la misma demanda interpuesta horas después, dado que, tras la pandemia, ni padres ni alumnos asisten con regularidad al plantel.

En ese sentido, también negaron las acusaciones en contra de la directora del plantel: ’…queremos deslindarnos de las declaraciones que se nos atribuyen, porque ni hemos visto que la directora haga mal uso de nuestras instalaciones ni hemos asistido regularmente a Cobaev como para denunciar lo que en los medios se menciona’.

Asimismo, denunciaron las irregularidades existentes en la supervisión en la que supuestamente se encontraron las pruebas de las acusaciones: ’La administración estatal les tenía que haber avisado cuándo se realizaría la mencionada inspección. Sin embargo, en la visita realizada el 3 de mayo, los inspectores no avisaron cuándo llegarían, y al momento de apersonarse en el plantel, no esperaron a la llegada de los directivos. Queda claro que los inspectores iban con la evidente intención de encontrar algo incriminatorio’.

De igual forma, denunciaron las anomalías con que se llevó a cabo la denuncia penal: ’Todo abogado sabe que, cuando se realiza una denuncia penal, no se deben mostrar a los medios las supuestas evidencias con las que se quiere proceder contra tal o cual persona, dado que forman parte de una investigación en curso, son elementos que deben mantenerse reservados. Atentando contra este principio básico del derecho, la Secretaría de Educación de Veracruz y los administrativos del Cobaev filtraron, primero, la información a los medios y, después, les mostraron todas las supuestas evidencias del mal uso de la escuela, inculpando directamente a la directora y a un subdirector’. Este actuar mostró, a decir de ellos, las verdaderas intenciones de los denunciantes: dar un golpe político a sus opositores a costa de la integridad de la imagen de personas honradas. Por eso mismo, se hizo hincapié en que las supuestas pruebas pudieron ser sembradas artificialmente.

Por último, los representantes de la comunidad estudiantil declararon que analizan la posibilidad de tomar acciones legales, pues las acusaciones en las que los involucran violan la presunción de inocencia: ’Procederemos legalmente contra la persona que los está señalando, pues está vulnerando la presunción de inocencia y manchando el honor y la imagen de personas honradas y que han trabajado siempre por la educación de los veracruzanos’.

Reiteraron no ser son responsables de las acusaciones que se les imputan a la escuela y a sus directivos y llamaron a un juicio justo para aclarar la situación: ’Esperamos que en el proceso legal se proceda conforme a derecho y no se abusen de las atribuciones judiciales’.