Kim Meylemans, especialista belga de skeleton, y Valeria Vasnetsova, biatleta rusa, denunciaron que fueron apartadas de la burbuja olímpica, tras dar positivo a Covid-19 y confinadas en instalaciones no oficiales por las autoridades chinas, donde las condiciones de alojamiento y alimentación no fueron las mejores.
La corredora belga, aislada por 14 días sin su consentimiento, reveló que le proporcionaron la misma comida durante las dos semanas que duró su cautiverio y fue sometida a dos pruebas PCR diarias para detectar Covid-19.
Meylemans manifestó, en redes sociales, su preocupación por el daño que las condiciones de su aislamiento le podría causar a su rendimiento en la cita invernal, ya que tampoco contó con las facilidades para poder entrenar.
Valeria Vasnetsova estuvo en aislamiento durante cinco días, a la rusa se le proporcionó la misma comida, el único vegetal que comió fue papa y comentó que le dolía mucho el estómago, luego de tener una dieta nutritiva por muchos años durante su carrera.
Vasnetsova declaró en cuenta oficial de Instagram: ’Me encuentro muy pálida y tengo enormes círculos negros alrededor de mis ojos. Quiero que todo esto termine, lloro todos los día y estoy muy cansada’.
En tanto, Rob Koehler, director de Global Athlete comentó: ’Estamos preocupados por todo el protocolo COVID-19, por las instalaciones de cuarentena y por todo lo que no está publicado. Los atletas no han estado bien informados y los Juegos no han sido transparentes’.
Antes del arranque de la justa invernal, Yang Shu miembro del comité organizador de Beijing 2022 anunció que cualquier comportamiento o discurso en contra de las leyes chinas y regulaciones serán castigadas.