Al menos 66 personas murieron debido a las inundaciones tras las fuertes lluvias registradas este martes en el municipio montañoso de Petrópolis, en Río de Janeiro, Brasil, informó el Cuerpo de Bomberos
Las autoridades locales decretaron el estado de calamidad pública después de que el agua haya arrasado amplias zonas del municipio, con infraestructuras y viviendas sepultadas por el lodo. Defensa Civil alertó de que las lluvias, aunque de manera moderada, seguirán cayendo a lo largo de este miércoles.
’Es una tragedia. Los Bomberos tienen dificultades para acceder a los espacios más críticos porque hay muchos vehículos abandonados en las calles. Son varias las zonas de derrumbe’, detalló el secretario de Defensa Civil de Río de Janeiro, el coronel Leandro Monteiro, quien anunció que se levantará un hospital de campaña
Son pocas la calles que no amanecieron con fuertes signos del paso de las lluvias, con edificios y vehículos sepultados, con enseres personales, cuando no cadáveres flotando por las improvisados arroyos que se han generado. Un ’escenario de guerra’, tal y como lo definió el alcalde de Petrópolis, Rubens Bomtempo.
Con el cielo un poco más despejado se pudo observar la magnitud de la devastación provocada por las lluvias, que también colapsó las principales vías de acceso.
Defensa Civil activó todas las alarmas para movilizar a la población. Los residentes de las zonas de riesgo están siendo dirigidos a los puntos de apoyo, que fueron abiertos para brindar ayuda en sus respectivas localidades. La precipitación acumulada ha alcanzado los 126 milímetros en apenas una hora.